Cuando se habla de Galápagos siempre pensamos en Darwin, las tortugas gigantes y los pinzones. Pero pocos, fuera de Galápagos, saben de las plantas Scalesia, comúnmente conocidos como Lechosos.
Scalesia es un género de varias especies endémicas de plantas de Galápagos. No existen en ningún otro lugar del mundo. Al igual que el caparazón de las tortugas o el pico de los pinzones, estas especies tienen la forma de sus hojas muy diferentes, dependiendo de la isla y de la zona climática en que habitan. La evolución en su máximo esplendor. Existen 15 especies de Scalesia en las Islas Encantadas. Entre las Scalesias, la mayoría son arbustos, solamente tres son árboles y de estos, uno tiene sus hojas en forma de corazón: Scalesia cordata. Esta especie de árbol únicamente existe en el sur de la isla Isabela.
La primera vez que escuché hablar de Scalesia cordata fue al llegar a Galápagos, a mediados del 2021, como científica a la Fundación Charles Darwin (FCD). Heinke Jäger, investigadora de la FCD, me contó que, en 2002, Patricia Jaramillo (otra investigadora de la FCD) y los guardaparques de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) en Isabela contaron alrededor de 1700 árboles en varios lugares. Lamentablemente, en 2019, Anna Walentowitz, estudiante alemana de posgrado, encontró menos del 1% de los árboles en los mismos sitios. Fue así que en agosto del 2021 tuve la oportunidad de unirme a una salida de campo a Isabela, para identificar dónde quedan estos árboles, cuántos hay, colectar semillas y empezar con el proyecto: “Salvando a la Scalesia cordata de la extinción”.
Buscando a la Scalesia cordata
El primer día fuimos a Cerro Grande, al oriente de la zona agrícola en Isabela. Al llegar al límite con el área del Parque Nacional Galápagos (PNG), observamos guayabas, cedrelas y otras plantas invasoras. Caminamos 400 m hacia el interior del área protegida y dentro de un cercado construido por los guardaparques como medida para intentar proteger una pequeña población de Scalesia cordata, vi por primera vez estos árboles. Los pocos árboles estaban separados uno de otro y en el área no había ningún arbolito juvenil que indicara regeneración en años anteriores. Esta situación me preocupó.
El segundo día fuimos al sur del cráter del volcán Sierra Negra. Durante la larga caminata era difícil a veces ver dónde se pisaba, pues un helecho ha invadido toda el área y forma un mar verde que impide el paso. Al llegar observamos no más de 15 árboles de Scalesia cordata, esparcidos por el paisaje. Pero de nuevo, ninguna plántula ni arbolito joven.
El tercer día fuimos a Caleta Iguana. Al bajar de la lancha y subir a la zona de Scalesia, el sendero estaba lleno de “palo blanco” (Chromolaena odorata), considerada una de las plantas más invasivas del mundo. En la zona de Scalesia encontramos solamente un juvenil, de los aproximadamente 30 árboles hallados.
Una pregunta se mantenía en el aire… ¿por qué no hay regeneración de esta especie? La razón aún no la sabemos, pero lo que sí sabemos es que, si la situación sigue así, el día que estos árboles mueran se acabará esta Scalesia para siempre.
Esperanza en el horizonte
Sin embargo, hoy creemos que no todo está perdido. Con los esfuerzos de la FCD y la DPNG ya se inició el rescate de la Scalesia cordata. Hemos recolectado miles de semillas de diez lugares diferentes, dentro del PNG y en la zona agrícola, en donde aún existen algunos árboles de Scalesia. Se ha acondicionado el vivero de la DPNG en Isabela para cultivar esta especie y ya trasplantamos 75 plantas en cuatro sitios. Actualmente, hay más de 1000 plántulas sanas y lindas, esperando turno para sumarse a las poblaciones de Scalesia.
Se realiza el control de plantas invasoras en seis sitios dentro del PNG donde hemos detectado poblaciones remanentes de Scalesia cordata. Este control ha permitido que por primera vez en varios años se vean nuevamente plántulas de Scalesia. Nuestra última expedición en noviembre del 2022 reveló que ya tenemos regeneración natural con más de 250 plántulas en cuatro sitios. Además, el trabajo continuo de Pedro Gómez, nuestro técnico isabeleño, y Ernesto Bustamante, nuestro enlace con la comunidad, ha logrado que productores, estudiantes y la gente de Isabela se interesen y conozcan de la Scalesia cordata. Todo esto ha sido una luz de esperanza. La comunidad de Isabela, la FCD y la DPNG estamos motivados para salvar a la Scalesia cordata de su extinción, después de todo, para conservar tortugas y pinzones también hay que cuidar su hábitat.
Tu apoyo es vital para evitar la extinción de esta importante especie que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo.
Para conocer más de este proyecto, visita: https://www.darwinfoundation.org/es/investigacion/proyectos/scalesia-cordata