Escrito en colaboración con Etienne Rastoin.
Las aguas costeras del archipiélago de Galápagos han sido objeto de interés científico durante los últimos 30 años, sin embargo, las profundidades de la Reserva Marina han permanecido poco exploradas y estudiadas. Es por esto que en el 2016, las Islas Galápagos se convirtieron en el escenario de un proyecto de investigación muy emocionante e importante. Se trata del proyecto “Montes Submarinos de la Reserva Marina de Galápagos (RMG)” que la Fundación Charles Darwin lleva a cabo en conjunto con la Dirección del Parque Nacional Galápagos y que ha logrado captar la atención internacional por las expediciones que se han realizado y por las posibles nuevas especies que se han encontrado.
Se estima que existen alrededor de 350 montañas submarinas solamente en la plataforma de Galápagos. Debido a que nunca se han explotado con artes de pesca industrial, se encuentran en un estado casi prístino. Estos pequeños oasis de vida en la inmensidad del océano abierto presentan un alto nivel de endemismo y desarrollan un importante papel para mantener la resistencia y adaptabilidad del entorno marino global. Las montañas submarinas también atraen especies de gran tamaño generando un valor económico en la pesca vivencial y representan un recurso importante para las pesquerías locales.
Este interesante estudio tiene un plazo de tres años y sus objetivos primordiales radican en el establecimiento de una línea base de la biodiversidad marina encontrada durante las expediciones y la determinación del valor de las montañas submarinas en términos de servicios ecosistémicos. Esto permitirá establecer las mejores medidas de protección para mantener el excelente estado de conservación de estos sitios, además de mostrar a Galápagos como un modelo de protección de los mares profundos. Estamos haciendo nuevos descubrimientos y este 2017 continuaremos con los estudios de estas comunidades de profundidad.
Un dato de interés que destacar fue la observación de numerosas envolturas de huevos de raya en varios estados de desarrollo encontradas en las cercanías de una fumarola negra muy activa. Esto indica que este sitio ha sido utilizado por dichos animales para depositar sus huevos durante varios años y ahora se están analizando posibles hipótesis que pueden ser muy relevantes a nivel científico. ¡El mundo animal no deja de maravillarnos!
La FCD se apoya actualmente en una extensa red de colaboradores internacionales expertos para completar la descripción taxonómica y los análisis genéticos del gran número de muestras. Al terminar con la identificación, los especímenes recolectados pasarán a ser parte de las colecciones marinas que la FCD custodia en nombre del Gobierno Ecuatoriano.
Se trata de un proyecto con gran potencial que podría posicionar a Galápagos como un sitio pionero en el estudio de estos ecosistemas. Por ejemplo, muchas de las especies descubiertas en los abismos representan una fuente inestimable de componentes químicos que podrían ser utilizados en la industria farmacéutica. Esto quiere decir que quizás la cura de algunas enfermedades que enfrenta la humanidad podría venir del fondo de los océanos. Como bien dice la frase, “No se puede proteger lo que no se conoce”; por lo que estudiar y proteger estos ecosistemas puede traer grandes beneficios a la ciencia y dejar en alto el nombre de Galápagos.
Este proyecto se realiza con el apoyo de los siguientes donantes y colaboradores nacionales e internacionales: Ocean Exploration Trust, BBC Ocean, Woods Hole Oceanographic Institution (WHOI), Helmsley Charitable Trust, Pristine Seas (National Geographic), St Mary’s College, Universidad de los Andes, Ocean Exploration Trust, University of Rhode Island, Southampton University, University of Hawaii, Manchester University, VideoRay y la Escuela Politécnica del Litoral del Ecuador (ESPOL).
Para más información por favor contactar a: jose.marin@fcdarwin.org.ec