“Quiero seguir volando” es la campaña que se realiza en Galápagos para disminuir el número de aves que mueren en la carretera por impacto por vehículos. La campaña se lanzó en Puerto Ayora, Santa Cruz, en el mes de abril, por la Fundación Charles Darwin junto con la Dirección del Parque Nacional Galápagos.
Cada día las aves residentes de Galápagos enfrentan la amenaza de ser atropelladas en las carreteras de las islas. Debido a varios factores como el exceso de velocidad en más de 90km/h, el creciente número de vehículos y de la vegetación sobre la calzada; y la falta de señalización en la calzada, etc.
Entre las aves más afectadas tenemos especies endémicas (es decir, aquellas que no se pueden encontrar en ningún otro lugar del mundo), como los canarios maría, pinzones, lechuzas, entre otras; aunque también son atropelladas especies nativas, migrantes e introducidas.
“Quiero seguir volando” fue el slogan creado por Luis Moreno, como una iniciativa ciudadana que tiene como objetivo generar conciencia en los conductores y en la comunidad, así reducir la muerte de aves en las carreteras de Galápagos por impactos con vehículos.
Además, existen otras ONG´s e instituciones públicas que han estado involucradas en este tema junto con la FCD, desde hace más de 20 años.
Aumento de la movilidad a través de los vehículos
En los años 80 había menos de 30 vehículos registrados en Galápagos, mientras que en 2016 ya se contaban con más de 1200 vehículos. La violación de las leyes de tránsito por el exceso de velocidad creó un nuevo problema: la mortalidad de las aves en las carreteras. Además, hoy existe un uso diferente de carretera porque existe abastecimiento desde Puerto Ayora hacia el Canal de Itabaca, para los barcos de turismo, y de abastecimiento de los enseres que vienen del continente hacia la comunidad isleña.
294 colisiones mortales en 11 días de monitoreo
En el 2018 durante un período de monitoreo de 11 días distribuidos en todo el año en la Isla Santa Cruz, se contaron 294 colisiones mortales de vehículos con aves. ¡La proyección es de más de 9000 aves al año!
Los conductores recorren el paisaje galapagueño a velocidades mayores a las permitidas en lugar de 50km/h a 70 km/h, y ponen en peligro principalmente a las aves machos y adultos.
Las carreteras atraen a las aves porque son una fuente de recursos, donde ellas pueden encontrar alimento (semillas, insectos, gravilla), agua, descanso y para cruzar de un área a otra.
Entre las principales recomendaciones para evitar colisiones, está mantener la velocidad máxima permitida y pitar si se ve un pájaro. Especialmente en la temporada de apareamiento, de enero a julio, cuando las aves están más activas en la carretera.
Como parte de la “Campaña Quiero seguir volando”, se realizan charlas dirigida a los choferes de la comunidad de las compañías de servicio, y en los próximos meses a los conductores y a la comunidad en general, donde se discuten temáticas ambientales. Las charlas son dictadas por la DPNG y la FCD, las cuales han sido bien acogidas por los conductores y la comunidad en general.
Durante las charlas, el científico Gustavo Jiménez (FCD), líder del proyecto y Galo Quezada contraparte de investigación (DPNG), exponen sobre la mortalidad de las aves por los automotores y las recomendaciones necesarias para disminuir el impacto.
“Hemos tenido una gran acogida durante las capacitaciones, los choferes muestran verdadero interés por este tema tan importante” dice Jiménez.
Las charlas han sido presentadas a diferentes instituciones locales de cooperativas de taxis y compañías de transportes de la Isla Santa Cruz. Las próximas charlas están planificadas para los meses de mayo (28, 30) y junio (4, 6).
Las capacitaciones para la comunidad se realizarán en julio, durante el Simposio de Ciencias de la Dirección del Parque Nacional Galápagos y la Fundación Charles Darwin. Además, se han planificado charlas para las instituciones locales como el Consejo de Gobierno de Galápagos, Gobierno Municipal de Santa Cruz, Armada Nacional, ONGs, etc.